El Sistema Educativo Venezolano está
comprendido por niveles y modalidades que cumplen un papel importante en el
desarrollo cognoscitivo, intelectual y educacional, del niño, niña y
adolescente de cada familia. En efecto, el Subsistema de Educación Primaria Bolivariana garantiza la
formación integral de los niños y las niñas desde los seis (6) hasta los doce
(12) años de edad, aproximadamente, o hasta concluir el sexto grado, último de
los seis que comprende la Educación Primaria. Es importante destacar además que
su finalidad es formar niños y niñas, activos, creativos, reflexivos, críticos
e independientes, que sean cada vez más participativos, protagónicos y
corresponsables en su actuación en la escuela, familia y comunidad; con
sentimientos de amor y respeto en sus diferentes manifestaciones hacia la
Patria, sus compañeros(as) y el ambiente, entre otros; también cualidades tales
como, la de ser responsables, honrados, honestos y solidarios, adquiriendo o
reafirmando sus hábitos de higiene individual y colectiva y todos aquellos que
favorezcan su salud preventiva e integral, que los prepare y forme para la vida
acorde con los fines e ideales de la CRBV.
Sin embargo, es el segundo
nivel obligatorio del sistema educativo venezolano atendido
bajo la perspectiva inclusiva e intercultural a niños y niñas con el
enfoque por competencias y con orientación didáctica a través de las rutas de
aprendizaje. Al igual que Promueve la comunicación en todas las áreas,
el manejo operacional del conocimiento, el desarrollo personal, espiritual,
físico, afectivo, social, vocacional y artístico; finalmente el pensamiento lógico, la
creatividad, la adquisición de las habilidades necesarias para el despliegue de
sus potencialidades. Es por ello
que, dentro de los objetivos de este nivel están: Reconocer
al niño y niña como persona, Valorar la
diversidad y la experiencia sociocultural, afectiva y espiritual del niño, Implementar estrategias para el desarrollo
del pensamiento lógico y matemático, la comunicación, la sensibilidad ,
expresión artística y la psicomotricidad del niño, Fortalecer la autonomía del
niño, el significado de la convivencia con otros, el respeto a las diferencias
y la comprensión y valoración de su ambiente familiar, cultural, social y
natural, así como el sentido de pertenencia.
Todo esto evidencia
que, la intención de la educación primaria es: generar una
población alfabetizada con conocimientos básicos de aritmética y convivencia
pacífica. La educación en este nivel debe orientarse a la reducción de la
pobreza, aumentar la productividad de los pobres, reducir la fecundidad
irresponsable, mejorar la salud y fomentar la participación plena en los
distintos espacios de la sociedad. De una manera más general, la educación
básica debe orientarse a fortalecer las instituciones civiles y
gubernamentales. Esto indica que, este nivel es el pilar que sostiene la
continuidad de estudios y a pesar de contar con un currículo innovador, requiere de procesos de articulación que
garanticen la continuidad a la educación secundaria donde se evidencian altos
porcentajes de repetición de grados y abandono escolar por lo que es necesario
que en los últimos años de la enseñanza primaria se generen estrategias de
apoyo para la continuidad educativa en cada escuela, que incluyan análisis de
la oferta de enseñanza en el nivel de educación media, considerando los
intereses y necesidades de los estudiantes.
En este orden de
ideas, el Ministerio de educación propone en
el currículo de educación
primaria: Dar prioridad al
aprendizaje de la lectura comprensiva, la escritura creativa, la literatura, el
aprendizaje de la suma, la resta, la multiplicación y la división, la geometría
y las fracciones. Así como la resolución de problemas, porque son
prerrequisitos de aprendizajes de secundaria por los cuales fracasan muchos
alumnos. De igual manera plantea en lo
actitudinal, que es necesario continuar profundizando en la formación en
valores universales, regionales y locales que permitan el rescate del comportamiento
ciudadano y el control de sus emociones.
Lo que fortalecerá la formación para el trabajo y en la producción de bienes y
servicios como medio para la transformación social y cultural del país. También propone valorar al estudiante como un
sujeto activo y constructivo, capaz de conocer y analizar los fenómenos y
situaciones de su entorno, asumiendo una actitud científica, crítica,
constructiva y reflexiva, lo que lo convertirá en un promotor de cambio a nivel
familiar, comunitario, regional y nacional.